Pancitos de anís con licor de anís

Cantidad: 24 aprox

INGREDIENTES
Espumado
30 gramos de levadura fresca o 1cda de levadura seca
1 cucharada de azúcar
2 cucharadas de harina
½ taza de leche tibia

Masa
5 tazas de harina (600 gramos)
½ cucharadita de sal
¾ taza de azúcar (150 gramos)
2 cucharadas de anís en grano
1 cucharada de miel
100 gramos de manteca blanda (mantequilla) o margarina
3 huevos
½ vaso de licor de anís
1 taza de leche (250cc)

Para pintar
Yema
Anís en grano

PREPARACION
Levadura. Poner en un tazón la levadura desgranada, el azúcar y la leche tibia.
Mezclar hasta formar una crema. Tapar el recipiente y dejar durante 10 minutos en un lugar cálido hasta que se realice el espumado.

Masa. Aparte, poner en un recipiente grande, el azúcar, la miel, la manteca y la leche caliente. Ir mezclando hasta que la manteca se derrita por completo y el azúcar se incorpore.
Dejar entibiar y agregar el anís, los huevos bien mezclados, el licor de anís y la levadura.
Revolver todo hasta unificar.

Por último incorporar la harina cernida junto con la sal. Al mismo tiempo se va revolviendo groseramente con una cuchara de madera hasta que el líquido sea absorbido por la harina.
Una vez que los ingredientes se unieron, volcar la preparación sobre la mesada y terminar de formar la masa con las manos. La textura de la masa en este momento es pegajosa y su forma resulta grosera a la vista.
Si fuese necesario se le puede agregar algo más de harina pero siempre recordando que la consistencia de la masa debe ser tierna.

Amasado. Comenzar a trabajar la masa espolvoreando la mesa y la masa con harina para poder trabajarla sin que se nos pegue.
Cada vez que sea necesario se le incorpora harina pero en cantidades mínimas para que la masa no absorba demasiado y luego quede demasiado firme.

Trabajarla con las manos en forma continua hasta que la masa se torne lisa, elástica y no esté pegajosa.
Formar un bollo alisándolo bien con las manos. Colocar el bollo en un recipiente que tenga capacidad como para que la masa duplique su tamaño cómodamente. Cubrir el recipiente con papel film ( nailon, plástico ) y luego con un paño.

Esto ayudará a que la masa se relaje más rápidamente. Este proceso puede llevar aproximadamente 30 o 40 minutos dependiendo de la temperatura ambiente del lugar.
Más cálido el ambiente, más rápido el levado.

Armado de los panes. Una vez levada la masa, volcarla sobre la mesa ligeramente aceitada y proceder a desgasificar haciéndole unos movimientos de amasado para quitarle todo el aire y que vuelva a su forma inicial.

Formar un cilindro con ella haciéndola girar sobre la mesa. Cortarla en porciones iguales como para formar panes (del tamaño que nos agrade). Bollar los panes y acomodarlos en una placa limpia y en forma encadenada.

Cubrirlos con un paño y colocar la placa sobre la cocina.
Dejar en reposo durante 10 minutos aproximadamente o hasta que las piezas estén levadas.
Antes de cocinarlos se pintan con yema y se cubren con semillas de anís.

Llevar a un horno precalentado, bien caliente (210º) para que estas piezas chicas leven y se cocinen rápidamente.
Una vez cocidas, retirar y apoyar sobre rejilla. Si desean conservarlo durante mucho tiempo ponerlos en bolsas de freezer apenas salen del horno. Cerrar la bolsa y una vez tibios congelarlos hasta 3 meses.